La odisea de encontrar un piso en Londres

Si hay algo peor que llegar a una ciudad donde llueve sin parar en pleno agosto, hace frío en la calle, un calor sofocante en el metro (que nunca funciona como Dios manda por cierto) y donde te cobran 3 libras por un café infesto es enfrentarse a la tarea de encontrar un piso.

Siempre se llega con algún piso medio buscado, lo que es inútil, ya que cuando llegas a firmar el contrato final, siempre lo han alquilado ya. Ahí empieza la ardua tarea de buscar un piso/estudio/habitación/zulo. Primero por el boca a boca : que si un primo del hermano de la vecina de Castro Urdiales busca a alguien para su piso, allá que vas, con todas tus esperanzas depositadas en lo que suele resultar un boquete oscuro en el este profundo a compartir con tres artistas adictos al tumbing, la marihuana y el porno y con la rata oficial del piso.

Así que decides cambiar de táctica: y viva el internet! Ofertas hay de todo tipo: para compartir cama con un tal Jayson, que promete no roncar, de habitaciones que dicen estar en el centro de Londres y acaban estando a 50 minutos en tren+metro+autobús+a pie... Al fin encuentras algo que parece ser un chollo y...
...continuará.